Las mejores empresas del presente encaminan sus metas hacia la realización de su material humano; son capaces de favorecer las relaciones interpersonales y entienden a las mismas como vitales para la consecución de sus objetivos. Por lo mismo, un buen Clima Organizacional, es sinónimo de una organización sana.
El paradigma del pasado con respecto a que el trabajador actuaba mejor bajo presión se ha ido desgastando al grado de volverlo obsoleto. El sometimiento al estrés podrá seguir siendo necesario para forjar carácter y medir la capacidad de una persona para sacar lo mejor de sí misma. No obstante, es una práctica que no procura el interés por el ser humano y por lo mismo debe ser sustituida por una que si lo haga. Es ahí donde toman partido los estudios de Clima Organizacional.
Dichos estudios brindan una percepción aterrizada de cómo el trabajador percibe la empresa donde se desempeña, qué tan bien se siente en ella y cómo la mejoraría. Es un instrumento ideal para medir la salud interpersonal de una empresa y funge como una herramienta vital para saber si se está yendo por buen rumbo.
Un estudio de Clima Organizacional puede estar compuesto por actividades grupales entre todos los trabajadores, entrevistas directas con especialistas que harán un análisis o simplemente a través de encuestas o cuestionarios. Sea cual sea la dinámica elegida, la esencia radicará en aterrizar el concepto individual y general de los empleados con respecto a la empresa.
Factores para un exitoso estudio del Clima Organizacional:
- Compromiso: uno de los puntos más claros e importantes a abordar. El desempeño de un empleado se reduce a su compromiso con la empresa. Si este punto está desgastado, habrá de buscarse enmendarlo cuanto antes.
- Comunicación: éste tema es uno de los más prolijos. Las deficiencias comunicacionales pueden ir desde la hostilidad como se manifiesta hasta la torpeza en su desarrollo. Es importante saber qué opina el empleado con respecto a cómo se maneja la empresa en materia comunicacional.
- Relaciones interpersonales: saber qué opina un empleado de sus otros compañeros, cuál es su rol ante ellos y cómo mantiene su relación con los mismos, es medular. Los empleados que no tiene buena relación con sus compañeros suelen ser bombas de tiempo que terminarán por migrar a la menor oportunidad.
- Liderazgo: cómo percibe el empleado a los personajes de jerarquía superior a él. Cuán capaces los siente para desempeñar su labor y qué recomendaciones les haría para mejorar.
- Sistemas de compensación: un empleado que se siente mal remunerado, hará solo lo mínimo para seguir obteniendo dicha remuneración. Comprender qué opina el empleado con respecto al tema económico es muy importante.